Seguimos repasando lo mejor de 2014. Esta es la selección de ArteZeta de las canciones nacionales.
“Cosas caras rotas” – 107 Faunos
1´35´´. Un minuto y medio de desparpajo lo fi, odas al verano y la adolescencia. Una retromanía subsumida en una de las canciones del año entonada por los platenses 107 Faunos lanzada en formato EP como adelanto de su más reciente álbum Últimos días del tren fantasma. Un riff de guitarra hipnótico, aterciopeladamente pop y un estribillo que se convirtió en un mantra: “Cosas caras rotas en la casa, vidrios abajo del agua”. Un vértigo melancólico sin retorno. P.D.M.
“Miserere” – Acorazado Potemkin
“Miserere” funciona como resumen de la Sonoridad Potemkin. El tema, con su arranque lerdo y el ya característico fraseo tanguero en la voz de Juan Pablo Fernández, se enciende a fuego lento y, cuando la serpiente “muestra su lengua en el tren”, lo que parece comenzar es un viaje en el furgón del ferrocarril Sarmiento y allí la explosión, los alaridos del invitado Beto Siless, el tetra abierto con los dientes y el bajo de Fede Ghazarossian y la batería de Lulo Esaín, galopantes, como si también viajaran con Destino Oeste, apretujados. Quien creía que no quedaban himnos para la Avenida Rivadavia luego del de Manal, aquí una contraprueba árida, punzante y dolorosa. S.S.
“Espía” – Adrián Paoletti
Paoletti nada calmo pero firme por las aguas atestadas del recuerdo, propio y ajeno, pidiendo liberación y nuevas oportunidades, como extendiendo una mano y rescate mutuo a quien nos mira desde lejos en la orilla de la nostalgia. Una melodía hipnótica como una marea que envuelve, y cuando el tema cambia de ritmo, todo se potencia y eleva mágicamente en unos coros sublimes. A.C. Paoletti logra una canción, y un disco, que certifican su capacidad de reinventarse y un talento sin fronteras. C.K.
“Nicotina y destrucción” – Ararat
Una banda nueva con músicos de mil batallas a cuestas reúnen sus fuerzas para una nueva Cabalgata hacia la luz. “Nicotina y destrucción” parece rememorar el día después de aquellas interminables luchas, donde los despojos de una guerra interna son imágenes que bailan frenéticamente sobre la línea del bajo de Sergio Ch. y alimentan la batería de Alfredo Felitte, que ruge como el motor de una nave que acelera su paso sobre la ruta y se atreve a mirar hacia un precipicio con el slide de Tito Fargo. M.B.
“El caso está cerrado” – Césped
Esta canción -que “encierra la violencia de un cross a la mandibula” como diría Roberto Arlt- abre el último disco de Cesped. Con la contundencia del estribillo que cierra la historia (“el caso está cerrado, no creo en nadie”) y una pegadiza melodía entre las guitarras y la batería, nos envuelve en “La Calma” y abre el camino hacia el disco que todos esperamos en formato físico para el 2015. G.P.
“Pacto de no agresión” – El Perrodiablo
Casi todos los fines de semana en algún lugar de la enorme mancha urbana que suele llamarse Capital y GBA hay dos cosas seguras: crímenes pasionales y fechas del Perro. Después del éxito en 2012 y 13, Doma, Chaume y el resto de los hombres que aman demasiado armaron en Cacería un tracklist nuevo para lo mismo de siempre. Fiesta cervezal, revoleos, pogo y corridas: la música de la revolución en su estado más puro. S.R.M.
“El Látigo” – Julieta y Los Espíritus
Guitarras noventosas, un sonido que remite a The Cardigans y Julieta Brotsky, una bestia pop en llamas. “El Látigo” es salvaje, dócil y aterciopelada, todo a la vez. Brotsky bardea a los demonios internos, exorciza a los de afuera y se saca la mierda. Nos encanta. J.V.
“A 1200 km” – Las Ligas Menores
El segundo tema del disco debut de Las Ligas resume el espíritu de la banda: una máquina ensamblada de cinco partes que a base de buenas melodías y estribillos memorables pega en el momento justo. Una canción que va in crescendo hasta terminar con la voz de Anabella Cartolano, suave pero con presencia, bajo una capa de sonido que contrasta con el silencio de la montaña. A.V.
“Devorados por el fuego” – Los Alamos
La vuelta de Los Alamos quedaba sellada allá por junio con esta canción que abre Luces Blancas, del que hablamos en esta reseña. Más cerca del stoner y el rock duro que caracteriza al disco, “Devorados por el fuego” se apoya en guitarras sucias y la voz de Peter que habla de un tesoro en el desierto. A.V.
“Los Pibe” – Los Rusos Hijos de Puta
No saben pasar desapercibidos Los Rusos Hijos de Puta. No quieren quedarse quietos y esperar que la buena estrella les traiga fama, fortuna y gloria. Lo que ellos quieren es hacer su propia suerte, y en el camino aprovechan y te parten la cabeza con una rubia que escupe verdades y la guitarra más punk e incendiaria del 2014 para combatir al colectivero con cara de ojete, a la vieja en la plaza y a los pibes que no dicen nada. “Los pibes de hoy, los viejos del mañana” y el No Future a la orden del día. M.B.
“La Energía de los planetas” – Mateo de la Luna en compañía terrestrial
La voz de Renzulli reverbera como rebotando en su pecho cargado, como la manifestación más clara de la emoción contenida escapándose entre las notas de esta canción/declaración de despedida. El tema que mejor muestra a MDLLECT en su faceta de banda y que invita al movimiento. Los coros claves de Aielo, la guitarra punzante de Lomanno marcando el norte, y la base rítmica desplegando un beat preciso y contagioso, algunos de los ingredientes de este planeta gigante de dulzura y sensibilidad pop. C.K.
“4-4-2” – Morbo y Mambo
Si los Morbo y Mambo son una banda que hace Afrodub Stoner, entonces “4-4-2 “podría ser la pulseada infinita por la supremacía de los géneros. El baile vs la distorsión, la melodía vs el libre albedrío, la sombra vs la luz. Pero no, en realidad el sexto track de BOA es la declaración de principios estos marplatense, que no son un conjunto, ni una agrupación, sino una confluencia de estilos, juegos y sonidos corriendo en conjunto hacia un mismo destino. Morbo y Mambo es una banda Bilardista y “4-4-2” es la que te hace bailar, como Maradona a los ingleses. P.C.
“Profunda desorganización” – Mostruo!
Tres segundos. Eso dura el sonido sinuoso de guitarras que inicia “Profunda desorganización”. Desconcierta, pero es casi tan importante para la canción (y narrativo, sí) como sus 3:52 restantes, aireados, refinados, tonales… En ese comienzo se de(s)vela el conflicto. Imposible omitir las voces transparentes de Lucas Finocchi y Kubilai Medina, y cómo el tema asciende a la cúspide del estribillo tras una simple pero efectiva melodía de guitarras casi escalística. La historia que sobreviene luego será más pesada y aunque aquí se muestre algo de esa sordidez, éste es su comienzo y pocas veces la desorganización sonó así de bien. S.S.
“Muchas Faltas “- Ok Pirámides
Ruiditos, quilombos sónicos, ansiedad motora y rock and roll. Todo eso tiene “Muchas Faltas”. La voz de Julián Della Paolera se te mete en el bocho, roza el fondo del cielo y presagia un huracán bardero. Hay que seguir de cerca a la nueva banda del ex Victoria Mil, su primer disco es de lo mejor que salió en el 2014. No digas que no te avisé. J.V.
“Hephaestus army”- Soldadores
Un riff blusero, acordes hard rock y una voz a la Robert Plant que hace dudar si uno está escuchando a una banda argentina o si encontró un viejo LP de Deep Purple que nunca había oído. Soldadores lanzó uno de los discos del año y su comienzo, con “Hepaestus Army” es demoledor. La guitarra entreteje una prisión de sonidos que cautiva al oyente sin brindarle escapatoria. El ejército de Hefesto -el dios griego del fuego y la forja- aplasta cráneos y vértebras. Un sonido valvular que vale la pena oír. P.D.M.
“Los Novios” – Sol Marianela
Un power pop incandescente explota desde el álbum debut de Sol Marianela, y vaya este tema como una inmejorable entrada a ese mundo de energía salvaje y relatos íntimos. Melodías frenéticas y bailables habitadas por el desamor, catarsis efervescentes con una sonrisa en los labios y un pie en el ritmo. Como aquí, donde habla de las perdidas adicionales tras el rompimiento de una relación, y donde dispara con ímpetu una frase simple y de profundo dolor: “Los novios dañan/ es mejor tener amigos”. C.K.
“La misma miel” – Sué Mon Mont
Cómo extrañábamos la parte más eléctrica de Rosario Bléfari. Más aun, si en la batería tenemos los rabiosos redobles de Tifa Rex (Los Reyes del Falsete) y la guitarra distorsionada de Niño Elefante (El Mató). Esta canción es el fiel reflejo de todo el disco debut de este supergrupo que a la música se le suma una letra que une una historia pasada con el más sincero y genuino presente. G.P.
“Aterrizaje” – Temporada de Tormentas
Hacé caso: cerrá los ojos. Respirá hondo y perdete entre las melodías distorsionadas y en el ritmo de batería de esta hermosa canción. Desde Del ruido y el espacio “aterriza” esta canción para todos aquellos seres que alguna vez nos sentimos perdidos, sin rumbo y sin una nave a la cual acudir. No te preocupes más: esta canción en la nave que viene a rescatarte. Por eso, perdete en ella, en sí misma está el rumbo a seguir. G.P.
“Alfonsina en Marte” – Tobogán Andaluz
¿Qué pasaría si Alfonsina Storni, con la poesía carcomiéndole las venas, se hubiera dejado asfixiar por la inmensidad del espacio exterior? ¿Y si un juglar posmoderno, guitarra eléctrica al hombro, se hubiese decidido a emprender su rescate inter estelar? De eso se trata el homenaje a la poeta que inmortalizó Tobogán Andaluz en su último disco. Arreglos de cuerdas y bajos bien lo fi que ya son un sello propio del trío enarbolan una duda introspectiva: “Si todo lo que he construido se me fue ahogando con agua del mar”. P.D.M
“Quema” – Un Planeta
Desde La Plata llega la mejor banda de pop de la temporada. ¿Deja vu? No, Un Planeta tiene los estribos más gancheros, un cantante que te engatusa al toque y una magia zarpada. “Quema” abre su último álbum y es un hit, así de cortito, sin vueltas. Escuchalo bien fuerte. J.V.
Textos de: Martín Barraco, Patricio Cerminaro, Pablo Díaz Marenghi, Claudio Kobelt, Gonzalo Penas, Sebastián Rodríguez Mora, Joel Vargas, Santiago Segura y Alejo Vivacqua.