El noveno arte está lleno de gemas, de obras que marcaron un antes y un después en la historieta argentina. Tres editoriales se le jugaron y reeditaron títulos imprescindibles. 

Por Hernán Martignone

La riquísima tradición de obras de la historieta argentina resulta muchas veces de difícil acceso. Distintas editoriales se están poniendo al hombro la tarea de reeditar material inconseguible o disperso en publicaciones periódicas que merece ser (re)leído y atesorado: por ejemplo, Hotel de las Ideas con Crímenes y castigos (Carlos Nine) y ¿Drácula, Dracul, Vlad? ¡Bah…! (Alberto Breccia) o Comic.ar con Elvisman (Diego Cortés, Juan Ferreyra y Leo Sandler), Barbara (Ricardo Barreiro y Juan Zanotto) y Animal Urbano (Guillermo Grillo y Edu Molina). En ArteZeta comentamos tres rescates publicados recientemente.

Las obras elegidas plantean a su modo una interesante propuesta desde el aspecto verbal y desde el gráfico, que se fusionan a la perfección: en Álvar Mayor, Carlos Trillo reescribe el habla del español americano del siglo XVI y Enrique Breccia nos revela la desdibujada América de entonces, con sus maravillas y dolores; en Evaristo, Carlos Sampayo rescata la parla argentina de fines de los cincuenta y principios de los sesenta y cada trazo de Francisco Solano López revive visualmente su espíritu; en Fantaciencia, Mauro Mantella recrea el estilo de las traducciones a “español neutro” y el dibujo clásico de Leandro Rizzo recorta en el papel mundos, seres y máquinas a placer.

Escrita por Carlos Trillo (Las puertitas del Sr. López, Sarna) y dibujada por Enrique Breccia (El Sueñero, Lovecraft) para la revista Skorpio entre 1977 y 1982, Álvar Mayor está siendo recopilada de manera completa en tres volúmenes (Las ciudades legendarias, El origen de los mitos y La realidad de los sueños, el tercero con fecha aproximada de salida en abril de 2022). Esta cuidada edición nos permite acercarnos a una reinterpretación en clave fantástica (de realismo mágico o mítico, por momentos) de la época de la pos Conquista de América, de las manos de dos de los mayores exponentes de la historieta argentina.

Los encuentros y desencuentros propios de la aventura y de la geografía sacuden al eterno buscador Álvar, a su amigo Tihuo, a su amada Lucía y a otros grandes personajes secundarios, a lo largo de caminos atravesados por “montaña, llanura, selva, río”, que el blanco y negro de E. Breccia entrelaza a la perfección. Leyendas americanas como la de Eldorado llegan a cruzarse con la mitología griega (Homero y el cíclope) o con la crítica al poder (despótico o mínimo) y al ansia desmesurada de poseer. El influjo borgeano se deja sentir en varias historias, algunas de las cuales son casi adaptaciones o reescrituras de cuentos como “Historia de los dos que soñaron” o “El inmortal”.

Edición integral de la obra publicada en las revistas Superhumor y Fierro entre 1983 y 1987, esta historieta del guionista y novelista Carlos Sampayo (Sudor sudaca y Alack Sinner, con José Muñoz) y del cocreador de El Eternauta Francisco Solano López nos sitúa en el sexenio 1957-1962, haciendo foco en la figura real a la vez que mítica del comisario Evaristo Meneses, por entonces jefe de la División Robos y Hurtos de la Policía Federal. En sus dieciséis capítulos, que nos llevan de Buenos Aires al interior del país o a La Habana, asistimos a un hermoso despliegue de recursos verbales y gráficos enmarcados en la estructura del relato policial, en el que los autores no se olvidan de pintar su aldea durante la “edad de oro de la delincuencia argentina”.

Sampayo sabe llenar el espacio de sus tramas complejas con la polifonía inigualable de diálogos y pensamientos entrecortados, pero también hacer silencio para que Solano se luzca representando con minuciosidad la época, la acción y los gestos humanos de cada personaje. Con luces y sombras, entre la honestidad y la violencia, Evaristo se erige en un hiperbólico y adusto (anti)héroe de mediados del siglo XX y le regala escenas inolvidables de épica urbana a la historieta argentina.

Homenaje a la ciencia ficción de todos los tiempos, a la literatura y a la propia historieta como lenguaje, Fantaciencia (2008) construye a partir del guion de Mauro Mantella (El hombre primordial, Monarch) una historia llena de misterio, imaginación y vueltas de tuerca que se apoya en el detallado y elegante dibujo de Leandro Rizzo (Crossed, Zombie Zero). En esta reedición, que cuenta además con anotaciones y bocetos de los autores, la obra ha sido coloreada con gran calidad y justeza por Marcelo Blanco, que suma una nueva profundidad a la faz gráfica.

Los Ficcionautas son una suerte de Cuatro Fantásticos (tres hombres y una mujer) que recorren diversos mundos ficcionales e intervienen para corregir anomalías (evitar que la ballena de Moby Dick muera y arruine el final de la obra o “que Tarzán encuentre su fin en una liana equivocada”). En su derrotero se enfrentan con peligros como el archienemigo de turno (el científico loco pero entrañable) y amenazas oscuras y metafísicas. Cada escena (cada texto, cada dibujo) es una pieza de relojería que nos conduce hacia la hora señalada de la verdad, en la que se pone en juego el pacto between the worlds of Fantasy and Fact, como dice Nabokov en su poema dedicado a Superman. Un libro ideal para quienes aman la fantasía científica en cualquiera de sus formas y las historietas escritas por Alan Moore o Grant Morrison.//∆z