Compartimos un poema del nuevo libro de la escritora cordobesa editado por añosluz

Despertamos sin conexión
despertamos sin hambre
Se piensa una clave
Se ponen cosas insuficientes al resguardo
Se polarizan los vidrios de un auto
Se etiqueta un muerto en domingo
El taxista repite que dios obra de formas misteriosas
Cargamos el tórax de un becerro
Juzgamos al deudo por el volumen del habla
por el color de sus prendas
Buscamos un pariente online
Buscamos un pariente en las habitaciones de un geriátrico
Esperamos que llegue el día
Esperamos cambiar nuestro plumaje
Y el taxista repite que dios obra de formas misteriosas
Hay muertos en talleres clandestinos
Muertos pidiendo cáscaras de nuestra música
Muertos sólo llamadas de emergencia
Hombres entubados vagan de un mundo a otro mundo
Hombres gatillan en la televisión
Granizo rompe los cristales
Y el taxista repite que dios obra de formas misteriosas
Lenguas áridas masturban su herida
Lenguas áridas esperan su traducción
pueblos dormidos esperan bajo su volcán despierto
Dispositivos borran y almacenan la existencia
Relojes resisten la falla del tiempo
Y el taxista repite que dios obra de formas misteriosas
Nos abrimos frente a la cámara
Nos abrimos de cuajo
nos abrimos paso entre los hielos de una memoria frigorífica
Para tocar un rostro editado en movimiento
Un rostro de vidrio templado
y el taxista repite que dios obra de formas misteriosas
Un adolescente respira de su popper
Una mujer respira su tabaco electrónico
Un anciano respira de una sopa sin aliento
Se pinta una habitación color durazno
Se cambia el wallpaper y el sonido de tu enfermedad
Se permuta el gato el loro y lo doméstico
y el taxista repite que dios obra de formas misteriosas
Se barre la calvicie de unas flores
Se pone en cuarentena las germinaciones del corazón
Se activan los antivirus de la noche
Se pasa de nivel
se presta una vida para pasar de nivel
Se compra otro nivel con tarjeta de crédito
El amor confecciona su telaraña nocturna
Una vidriera luce sus bellos accesorios
Sangra el óxido de nuestra pequeña jaula
El planeta regente se enfría
algo crece en la prisión del sueño cerramos sesión
bajamos del taxi
Estamos de alta, estamos online,
Estamos cargados en el sistema
Estamos en silencio
Tenemos dificultad con las palabras

Laura García del Castaño nació en Córdoba, el 17 de octubre de 1979. Ha publicado ocho libros de poesía de los que rescata la mitad: El Grito (edición de autor, 2004), La vida en que sueñas (Recovecos, 2012), El animal no domesticado (Pan comido, 2014), El sueño de Sara Singer (Llanto de mudo, 2014, y reeditado por Caleta Oliva en 2017) y Los demonios del mar (Ediciones del Dock, 2015). Publica en el blog: https://lapalabrasembrada.blogspot.com/

Mañana a las 19:30 se presenta Sangre del día, junto a otros títulos nuevos de añosluz, en Mecánico Bar (Dr. Nicolás Repetto al 2000, CABA). Más info haciendo click aquí.