En abril comenzó a emitirse la segunda temporada de The Killing y el misterio sobre quién asesinó a Rosie Larsen ya tiene una recompensa de U$S 10.000 para el fan de la serie que logre descubrirlo.

Por Luis García Fanlo

The Killing es un policial creado por Veena Sud (“Cold Case”) que reimagina, sin ser remake, la exitosa serie danesa “Forbrydelsen” (2007) ambientándola en la lluviosa y gris ciudad de Seattle (Washington). El brutal asesinato de una joven adolescente de clase media en la periférica ciudad de Seattle se convierte en una caja de Pandora que va sacando a la luz una enrevesada trama de ilegalismos y corrupción política y policial, que se combina con la doble vida de todos y cada uno de los personajes que de una u otra manera están implicados por acción u omisión en la muerte de Rosie Larsen.

La complejidad de la trama se sostiene en la verosimilitud genérica y social de este policial en el que el espectador tiene la misma información que la pareja de detectives que investiga el crimen, los problemáticos Sarah Linden (Mireille Enos) y Stephen Holder (Joel Kinnaman), haciendo que la realidad social y ficcional entren en una zona de indiferenciación. Pero además, el discurso ético y estético del relato ahonda en las miserias de la condición humana de esa clase media norteamericana periférica atravesada por la crisis epocal de valores que parece signar nuestra actualidad. Una joya del género policial que logra reproducir eficazmente los elementos clásicos del género y, a la vez, rompe con sus remanidos estereotipos basados en la representación binaria del bien y el mal.//∆z

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