¿Cómo hacer un buen Unplugged? Una respuesta a esa pregunta la tiene Zoé, que con catorce canciones, entre clásicos, éxitos, rarezas, un tema nuevo e importantes invitados de la escena hispanoamericana, hizo un excelente “desenchufado”.

Por Joel Vargas

Zoé -para quienes no la conocen- es una banda de rock alternativo mexicana que surgió en 1997 y fue creciendo en popularidad poco a poco. A nivel sonoro se la podría emparentar un poco con la última encarnación de Babasónicos, pero con letras mucho más románticas y no tan irónicas. Discos como Rocanlover (2003), Memo Rex Commander y el Corazón Atómico de la Vía Láctea (2006), los posicionó en el mercado como una banda arriesgada, que va más allá de la canción pop y juega con conceptos que derrumban las estructuras típicas.

El show acústico se grabó el 5 de octubre del año pasado en los estudios Churubusco de México DF, con el lugar lleno de fans hipnotizados por las melodías rocanlovers. El pasado 22 de marzo salió a la venta y en poco tiempo se convirtió en disco de oro. Es más, el próximo 5 de abril se podrá ver el Unplugged en la pantalla grande. ¡Si! Hasta al cine llegó Zoé, a Cinepolis, un complejo de cines que abarca varias ciudades de México como Jalisco, Guadalajara, Monterrey y Distrito Federal.

“Música de Fondo” es el nombre del disco, pero ellos no son solamente música de fondo: por más que algún fanático lo tome para el lado de que son la banda sonora de su vida, Zóe es un grupo con una calidad artística impecable a la hora de los arreglos vocales y musicales. León Larregui, con su majestuosa voz, nos hace viajar por universos sonoros, más si está acompaño por otras dos grandes voces del rock en español como Enrique Bunbury y Adrian Dárgelos. El español aporta su íntima voz en “Nada”, y logra junto con León una emociónante interpretación. Se nota cuando el público acompaña con gritos, sobre todo en el estribillo: “No hay nada que pueda perder, que no pueda hacer, que no pueda amar, que pueda soñar”. La canción “Dead” merece un párrafo aparte: Dárgelos, con voz imponente y sensual (como un Sandro lisérgico), se mezcla con la voz de León y forman el cross-over perfecto para que las chicas griten como locas, con esos gritos muy agudos que más de uno habrá sufrido en un recital. Así que cuidado con escuchar está versión de “Dead” cerca de algunas muchachas proclives a emitir alaridos.

El aporte más alto de los invitados es la voz increíble de Lo Blondo (Denisse), cantante de Hello seahorse!, banda de pop rock alternativo mexicano. Con su voz de soprano genera climas introspectivos y matiza los graves. Esto se ve en los dos duetos que hace con León y que dan como resultado los mejores momentos del álbum: primero en “Soñe” (el primer corte del disco), que originalmente no estaba en ningún disco oficial de la banda y había formado parte de la banda sonora de la película Amar te duele, dirigida por Fernando Sariñana. Este tema quizás es lo mejor que la banda haya compuesto, por la letra, los arreglos y la cuidada interpretación. Lo escuchás una y otra vez sin cansarte. 100 % hit. El segundo dueto se da en “Luna”, y se destaca aun más Denisse. Su hermosa voz se roba todo el tema y la música queda de fondo. Otro invitado que sobresale es Chetes, músico multinstrumentista, baluarte del rock alternativo mexicano por haber formado parte de Zurdok y Vaquero, ambas bandas de culto de la escena azteca, que le aporta a la banda conformada por León Aguirre (guitarra y voz) Sergio Acosta (guitarra), Rodrigo Guardiola (batería), Ángel Mosqueda (bajo) y Jesús Báez (teclados) una calidad sonora mucho más rica.

Fue acertada la elección de la lista de temas, porque eran las canciones que tal vez se adaptaban de mejor manera al formato unplugged, y dio como fruto las excelentes reversiones de “Vía Láctea”, “No me destruyas”, “Sombras”, “Veneno”, “Paula”, “Poli“ y “ Love”. Éstos dos últimos fueron enganchados de manera exquisita, y muy festejados por el público. Sin embargo, a la hora de elegir temas, quedaron afuera éxitos como “Miel” y “Tarántula”, que representan esa experimentación de los mexicanos ya mencionada anteriormente. Pero, todo no se puede ¿No? Presentaron además un tema nuevo, “Labios rotos”, que sigue por la senda rocanlover con una melodía muy pegadiza y una letra que convierte a León en una suerte de latincrooner-espacial.

En nuestro país tuvimos la suerte de que Zoé nos visite tres veces ya. Esperemos entonces verlos en vivo nuevamente y disfrutar de la banda en el pico más alto de su carrera. Zoé alcanzó la madurez y no es solamente música de fondo.