Con impronta lo-fi y espíritu punk, Los Charmanders arremeten con canciones enérgicas en medio del ruido. Charlamos con ellos para conocerlos mejor.

Por Alejo Vivacqua

“Ey amigos, quiero que sepan que los necesito

quiero que sepas que hoy me quiero morir con vos

ey amigos, vamos a tomar drogas blandas a la calle…” ♪♫

No hay mejor carta de presentación que la letra de “Amigos”, primer tema del EP  Mil Porquerías, para conocer la propuesta de esta banda de Caballito formada por cuatro pibes que vienen haciéndose un lugar en la escena.

Criados en la nueva movida independiente que tiene a El Mató como abanderados, Los Charmanders editaron dos EPs, Minería y el ya mencionado Mil Porquerías, en los que, a base de mucho ruido y voces desprolijas, le cantan a las pibas del barrio, los discos viejos y los videojuegos.

Con algunos cambios de integrantes -entre los que se cuenta la ida de Ariel Polosecki, uno su cantantes-, los actuales miembros son Francisco Polosecki, Santiago Barbeito, Patricio López y Federico Santa Ana, con quien hablamos sobre el pasado, presente y futuro de la banda.

AZ: ¿Cómo y cuándo se forman Los Charmanders?

Federico Santa Ana: A fines del 2008 y principios del 2009, durante el colegio secundario. La idea era hacer una banda que hiciera covers de las bandas que nos gustaban y que sonara como la Velvet Underground, tocando con nuestros mejores amigos. Después de los primeros shows llegamos a nuestra primera formación más o menos estable en la que estábamos los cuatro que hoy somos Los Charmanders y nuestro mejor amigo Juan Valente, que hoy toca en José Unidos, en Bichos y es parte fundamental de El Club de Grabación. Teníamos dos guitarras, bajo y batería.

En el verano del 2010, Frano (Francisco Polosecki) se sumó con la guitarra en la banda y empezamos a ser tres guitarras. Durante ese año empezamos a hacer nuestras primeras composiciones. Todo salía en la sala de ensayo, eran canciones muy precarias, violentas, sin letras y sin melodías vocales. En el medio de eso surgió la necesidad de tener un cantante que se hiciera cargo de las letras, y después de un año así fue que se sumó Ariel (hermano de Frano) como cantante. Así seguimos ensayando y tocando en vivo muy esporádicamente, haciendo una cosa bastante deforme (hace poco alguien que nos vio en esa época dijo que hacíamos algo así como hardcore noise o punk psicodélico).

En 2012 Frano empezó a traer sus canciones y ahí fueron naciendo algunos de los temas que están en “Minería”. Por diferencias estéticas, Juan nos dejó y volvimos a ser dos guitarras, bajo y batería, una formación más tradicional y empezamos a sonar más punk cancionero.

AZ: ¿Cuáles dirían que son sus influencias? ¿Con qué bandas les gusta que los asocien?

FSA: Nuestra mayor influencia es Andrés Calamaro, todos en la banda somos fanáticos. Nos encantan sus letras, la onda de poeta maldito, urbano, drogón, enamorado depre. Nos metimos de lleno en toda su discografía e inéditos, en especial “El Salmón”. Capaz no es nuestra influencia más directa en lo musical, pero sí es de los artistas más importantes para todos.

Por el otro lado están los Pixies, My Bloody Valentine, Sonic Youth, The Jesus and Mary Chain, la Velvet Underground, y esas bandas, que son las que sí nos influenciaron más a la hora del sonido, o de pensar en qué tipo de música nos gusta hacer. Pero más allá del género, creo que preferimos que no nos relacionen con ningún grupo.

AZ: Tuvieron cambios en la formación de la banda. ¿Cómo creen que evolucionaron hasta llegar al sonido actual?

FSA: Empezamos haciendo cosas muy desprolijas, canciones precarias, sin mucha estructura, o con estructuras complejas al pedo. Teníamos tres guitarras y ni sabíamos qué hacer con eso. Cuando Juan se fue de la banda fue cuando realmente empezó a decantar lo que queríamos hacer.

Creo que nuestro sonido actual lo fuimos formando a lo largo de todos los años tocando juntos, que nos hicieron mejorar bastante como músicos (Frano ni tocaba la guitarra cuando empezamos, yo empecé a tocar el bajo estando en la banda). Fuimos generando confianza y recursos que nos dejaron hacer la música que de verdad queríamos hacer. Si bien todos somos mejores amigos, y pasamos muchísimo tiempo junto afuera del contexto de la música, todo este tiempo tocando juntos nos hizo crecer mucho.

AZ: En las letras hay mucho de barrio, amistad y espíritu adolescente. ¿En qué se inspiran para componer los temas y cómo se acoplan los cuatro en ese proceso de composición?

FSA: Son las cosas que pasan en nuestra vida. Como ya dije, somos mejores amigos desde hace años y eso también se ve en las canciones. En general la dinámica con los temas es que Ocho (Santiago Barbeito) o Frano los componen en su casa y a veces los graban. Ahí los traen a la sala, los escuchamos y pensamos en cómo hacer nuestra versión. En general nos alejamos bastante de lo que grabaron ellos en sus casas, van surgiendo muchas cosas nuevas en la sala.

AZ: Están grabando su nuevo disco… ¿Qué se puede esperar de él?

FSA: Este nuevo disco que estamos grabando va a ser bastante más oscuro que  Mil Porquerías, por lo menos desde nuestro punto de vista. Bajamos un cambio con las canciones; si bien no dejaron de ser rockeras, son como más sentimentales, más maduras.

Por otra parte, este disco va a venir con mucha más producción. Los dos EPs anteriores eran como una foto del vivo. Los grabamos “en vivo”, todos tocando a la vez. Para este pensamos en ir más allá y arreglarlo mejor, aprovechar el recurso del estudio para lograr algo más complejo en el sonido, con más capas, más arreglos, capaz alguna guitarra acústica o teclado, que no tenemos en el vivo. La idea es no alejarse de lo que la gente ve de la banda en lo recitales, pero sí usar todos los recursos que tenemos a nuestro alcance, ya que además varios en la banda trabajamos con audio y eso nos facilita bastante a la hora de grabarnos a nosotros mismos.

AZ: ¿Cómo ven la escena independiente hoy en día? ¿A qué bandas y músicos escuchan y admiran?

FSA: Creo que la escena independiente de hoy en día está muy bien. Hay muchas bandas muy buenas haciendo cosas muy interesantes, y la verdad es que todos los fines de semana hay recitales para ir a ver, con más de una banda copada, se pueden ver cosas muy buenas en vivo.

Nos gusta mucho lo que hace Prietto en Viaja al Cosmos y en Los Espíritus. Nos gustaba mucho lo que hacía Reno, y de hecho eso nos llevó a ser muy amigos suyos y varios de nosotros participamos en sus últimos proyectos (Frano grabó en su último disco solista, y yo toco el bajo en su nueva banda). The Hojas Secas nos encanta. El disco de Los Vivales es muy bueno. Bicho Bolita y París Gatitos tiene unas canciones excelentes. El Perrodiablo, Los Totales, Clonosaurios. No es actual, ni de Buenos Aires, pero Los Chicles, de Tucumán, nos rompieron el bocho hace poco. Los conocimos gracias a internet y se convirtieron en unos de nuestros músicos de cabecera.

AZ: ¿Qué esperan para el futuro?

FSA: Esperamos que el disco que estamos grabando quede buenísimo. Cuando lo terminemos también queremos seguir grabando. Tenemos pensado hacer alguna grabación casera lo-fi en el verano, tal vez.

Seguir tocando, hacer canciones nuevas, grabar nuevos discos, tocar en más lugares y con más bandas, creo que esos son nuestros objetivos.

AZ: ¿Cómo describirían su estilo para alguien que no los conoce?

FSA: Mientras grabábamos las bases del disco, Marcos Padró, nuestro ingeniero de grabación, dijo que “noise y romántico” era una muy buena descripción, y creo que aplica bastante bien.//z

Próximo show:

Viernes 22/08 – 21 hs – Junto a Los Vivales en Naranja Verde: Av. Santa Fe 1284, Capital Federal. Gratis.