Serj Tankian saca a la luz su tercer disco como solista  y retoma aquel legado musical de los primeros discos de System Of a Down. Harakiri: Una crónica acerca de la globalización y su la lucha.

Por Ignacio Barragan

Es un tema recurrente el constante aludir a reivindicaciones sociales en la historia de la música como único motor inspiracional. Serj Tankian, por supuesto, no es la excepción. La diferencia entre este caballero y la enorme masa de artistas que usan como bandera las mismas luchas sociales como fundamento de sus canciones es que el cantante de System Of a Down innova y como si fuera poco, incorpora en cada uno de sus discos solistas cierto matiz individual en cuanto a música y estética. Además, seamos sinceros, nunca esta de mas tampoco que este tipo de artistas con trayectoria fundada en la contracultura de los 90’ saquen un disco cada tanto, posiblemente ayude a la nuevas generaciones.

Harakiri es su tercer álbum solista y prácticamente la continuación de su anterior Imperfect Harmonies siendo una pieza que cae perfecto en el rompecabezas de su discografía. Cuenta con temas algo monotemáticos pero que pueden variar en su estilo, llegando a ser un punk ochentoso como también algo de electrónica disimulada. Esta de más decir que todo esto caracterizado por el estilo propio y único de Serj Tankian que sin duda alguna ya nos tiene acostumbrado.

En fin, el cantante de System Of a Down y la eterna lucha por los derechos del animal y del humano, ósea la doble liberación. Este disco no puede dejar de estar en la batea de aquellos que compartan las ideas con el señor o que simplemente sean unos nostálgicos de aquellos años dorados y juveniles como lo fueron los noventa.//z

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