¡No gato, no mires pa’ ´trás! No, ¡te dije que NO! NOOOOOO.
Por Ezequiel Heyn
Hace muchos, muchos años, cuando arrancaba la facultad, recuerdo una vez que fui con un amigo caminando hasta la villa Corea, para comprar una piedra de marihuana. Una de las cosas que más me llamó la atención fue el cambio repentino de la trama urbana, como que doblás una calle y te encontrás en una micro sociedad, diferente pero similar a la de todos los días: todo lleno de pasillos, pibes tirados en un callejón al grito de “te vendo porro” y dealers en la esquinas o en las puertas de sus casas, con ziplocs múltiples que tenían paco, éxtasis, pepas piola, marihuana y merluza. Todavía me resuenan las palabras de mi amigo: “no mires para atrás, todo esto es normal, así que no les des bola porque sino se va a poner “gede” el asunto”. En mi cabeza me repetía don’t look back, don’t look back, como el nombre del juego del que vamos a hablar ahora.
Don’t Look Back es un juego indie de plataformas, con un toque artístico realizado en pixel art. Tiene un estilo muy old school, debido a que es un juego sin scroll, o sea que presenta una serie de pantallas que hay que atravesar llegando al otro extremo (ponele, arrancás en la punta izquierda y tenés que llegar a la derecha). Decidí escribir sobre este juego por tres cuestiones muy simples: primero, la historia es genial gente ¡GENIAL! No tardás más de 15 minutos en pasarlo y te queda una sensación grandiosa a medida que vas atravesando los distintos obstáculos y desafíos que se presentan. Segundo, la música, que a mi criterio es el factor clave para meter al jugador en ese ambiente que presenta el juego. Tercero, el diseño de nivel, que si bien es simple, está muy bien logrado porque de alguna forma remite a juegos viejos como el Pitfall de Atari. Entonces, consigue un buen balance entre lo que es la parte de saltar plataformas, evitar tocar ciertos objetos y la acción que a uno lo mantiene bastante entretenido. Sobre todo porque cada una de las pantallas se puede distinguir por su particularidad, cosa que no es nada fácil de hacer en ningún género particular.
Hay algo más que debería explicar: por qué se llama Don’t Look Back… La cosa es que si hago eso les cagaría el juego, así que les dejo el link para que lo jueguen. Bueno, eso es todo, espero que disfruten y, si tienen ganas, dejen algún comentario.