Kanye West extrema los límites de lo que entendemos por disco con The Life Of Pablo, un interminable work in progress del que cada día nos enteramos un poco más. ¿El primer disco nativo digital?
Por Gabriel Feldman
Si en Yeezus (2013) Kanye Omari West se proclamaba Dios, hecho que alentó a algunos fanáticos a sacar una Biblia remplazando las apariciones de Dios por uno de sus nombres (no nombrarás a Ye’ en vano), The Life Of Pablo podría ser entendido como el primer evangelio. El nombre del disco ya es sugerente: La vida de… Y si una de las piedras basales del arte del rap es la autorreferencia y el alarde, donde Yeezy tal vez sea el emblema del ego-narcisista del siglo XXI, el disco básicamente repasará sus distintas proezas y avatares. Un antes y después en el mundo del hip hop en particular y del pop en general. ¿Y quién mejor que Kanye West para contar la buena nueva de Kanye West? Porque nadie quiere a Kanye West como Kanye West quiere a Kanye West.
Aún antes de escuchar cualquiera de sus canciones, cada vez que Mr. West usó su cuenta de Twitter para tirar alguna novedad dejó una estela de comentarios, notas, memes, aplicaciones para copiar el arte de tapa modo paint, etcétera. Pero cuando todo estaba encaminado y varios fans entraban a TIDAL para descargar su copia, otra vez @kanyewest tenía una sorpresa. El disco se demoraba por otra semana porque tenía que ‘arreglar (el tema) “Wolves”’. A su vez pedía a sus seguidores que por favor se suscribieran a TIDAL, el sistema de streaming de alta definición que su amigo Jay-Z lanzó en octubre de 2014, del que es artista exclusivo y accionista. Luego la página dio de baja la opción de descargar y confirmó que el streaming disponible online correspondía a una “versión parcial del álbum”. Durante los días siguientes TorrentFreak calculaba que ya se lo habían bajado cincuenta mil personas y en PirateBay había diez mil personas compartiendo el archivo. Tampoco se sabe si cuando salga a la venta el cedé (si sale) será igual al publicado online o será una edición deluxe. Mientras tanto, peleando su batalla en el juego de tronos de los servicios de venta y streaming, @kanyewest avisó que su disco nunca estaría en los Apple Store, ni se iba a vender. “Sólo lo podés conseguir en TIDAL”.
Por lo pronto, en los 18 tracks parciales-oficiales resaltan los sonidos que cruzan guiños al gospel con las bases electrónicas minimalistas retro-90s. Resulta fundamental la colaboración del productor Metro Booming, la sensación en las pistas de baile de Atlanta y uno de los príncipes del hip hop, como lo denominó la revista Forbes en su lista de jóvenes con menos de treinta años va camino a reclamar su corona. Por su parte, T.L.O.P es un disco donde el rol de Kanye como productor es más importante que como intérprete. De por sí nunca fue un rapero caracterizado por sus habilidades como MC, pero deliberadamente cede algunos de los momentos más memorables a las voces de la nueva camada con los que se asocia: Chance The Rapper (“Ultralight Beam”), Kid Cudi (“Father Stretch my Hand”), The Weeknd (“FML”) o Kendrick Lamar (“No More Parties in LA”). Se dio el lujo de dejar afuera del disco “All Day” con Allan Kingdom, otro de los príncipes con corona en el futuro. “Yo soy el Jordan y el Steph Curry de la música, eso significa que soy el mejor de dos generaciones” escribió @kanyewest el 15. En “30 Hours”, salvo por esa patinada de “bonus track” que empantana el tema (hay una primera versión más limpia en su soundcloud oficial), the only rapper compared to Michael demuestra por qué es, cuánto menos, uno de los mejores: la capacidad para recontextualizar una parte ínfima de una canción casi olvidada como núcleo de la base bailable y toneladas de onda. Imparable.
Pero toda esa incontinencia tuitera, cambios de último momento, además de la estrategia de marketing, hace pensar: ¿cómo debería hacerse un disco para el tiempo tan inmediato, ansioso como procastinador de Internet? ¿Se puede seguir pensando en el álbum de la misma manera?
Llamar disco a T.L.O.P es una formalidad porque por el momento como ese “disco” no existe. Es un conjunto de archivos, presentaciones, información disponible. Además de fotos en Instagram, tuits, también se presentaron dos portadas posibles y versiones alternativas de “Facts”, “No More Parties In LA”, “Real Friends” y “30 Hours”. Incluso en una primer momento el álbum constaba de diez tracks que se escucharon en la presentación de su colección de ropa para Adidas en el Madison Square Garden (con streaming en vivo vía TIDAL). Luego llegaron otras versiones extendidas pero igual de inconclusas. Un proceso de “composición” tanto como de “descomposición” que en la mayoría de los discos está vedado. La metáfora que muchos artistas usan del disco como “fotografía de un momento” ahora estallada en la social media como un proceso dinámico. ¿Un disco nativo digital? Para seguir pensando el disco/álbum en tiempos de Internet. @kanyewest ya anunció que tiene otro disco para el verano.
Update 26/02/2016: Hoy se filtraron los “demos” del disco, aunque decir “demos” es un poco peyorativo. Son versiones alternativas de casi todos los temas, tan acabadas como las diez canciones se presentaron oficialmente en el Madison Square Garden o que se subieron a TIDAL (con algunos cambios en las letras, distintos arreglos, participaciones de otros invitados). También hay versiones distintas de canciones como “All Day” y “Only One”, que se habían presentado en sociedad durante 2015 en las galas de los Grammys y los Brit Awards, respectivamente, y no forman parte del disco. Esas rarezas de las que grandes artistas siempre se cuelgan para re-editar su material en el futuro. Si West no dudó en hacer públicos los giros, arreglos y cambios, ¿tomará nota de la repercusión de los mismos? En distintos foros los fans eligen sus preferidas y analizan los cambios y arriesgan explicaciones para los mismos. ¿Sería descabellado una aplicación que elija entre las versiones, las distintas tapas, y cree diferentes copias de The Life of Pablo? Podría ser un experimento interesante. ¿Sueña Kanye West con ovejas eléctricas? Todo parece indicar que saldrá un objeto deluxe. ¿Y si lo hace un fan? ¿No sería el siguiente paso de un disco nativo digital? El disco como Software. No hay copia única, producen los que hicieron la música, la máquina que selecciona y uno que hace un click.//∆z
https://www.youtube.com/watch?v=EYO7urcy59M