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Antes de volver a tocar en vivo (La Usina del Arte, viernes 29 de octubre), el músico analiza sus influencias, su mirada sobre el rock y su último lanzamiento en formato de single.
Por Carlos Noro Fotos de Martín Bonetto
Es de la inquietud y de la pregunta permanente de donde parecen salir las canciones de Carca, quien luego de un largo tiempo pandémico vuelve a tocar en vivo para presentar nuevas canciones que fueron estrenándose en el último tiempo en formato single. Desde el escenario, hará rugir su rock valvular, psicodélico y blusero con una mirada siempre puesta en lo que va a venir: “No me interesa el retro como estética, el pasado está hecho y yo quiero ver siempre cómo es el futuro”, dice casi como un axioma que representa su propuesta estética con la que insiste con romper con lo establecido.
AZ: Para un artista como vos que disfruta tanto de tocar en vivo, todo lo que sucedió durante la pandemia seguramente de alguna manera te afectó. ¿Cómo lo fuiste llevando?
Carca: La verdad es que no encontraría válido ningún fundamento que justifique el quejarse o “llorar la carta” por esa circunstancia. Hubo gente que perdió a sus seres queridos o qué pasó de pobre a algo peor, lo cual es tremendo. Yo no soy quien para quejarme, porque por suerte no me pasaron cuestiones de ese tipo.
AZ: Desde afuera se te ve como un trabajador del rock: la música es tu trabajo y lo que te permite subsistir. ¿Cómo se hace para sostenerse económicamente siendo músico en Argentina?
Carca: Es una pregunta compleja y voy a dar una respuesta sincera: ¡No lo sé! (risas). Supongo que es una reacción y una consecuencia que tiene que ver con todo el amor, tiempo y coherencia que le dedico a mi delirio. Eso es lo que me hace feliz y lo que disfruto. Luego, lo que viene, tiene que ver con eso.
AZ: Sos un artista que dialoga tanto con el rock argentino de los setentas como con la movida alternativa de principios de los noventas, donde empezaste tu carrera solista. ¿Qué tienen que ver con tu historia cada una de estas épocas?
Carca: En primer lugar, diría que no me identifico con ninguna. No creo que pertenezca al rock alternativo de los noventas: lo que pasa es que ahí se me conoció y en aquel momento asomé, pero lo cierto es que venía peleándola desde mucho antes. Digamos que soy un chico de los siglos veinte y veintiuno, eso es más real. Respecto al rock argentino, lo que es cierto es que admiro profundamente, como buen conocedor, a los que nos regalaron y enseñaron la posibilidad de cantar en argentino, no en castellano. Y ahí te puedo mencionar Javier Martínez, Pappo, Moris, Tango, Spinetta, Molinari, Miguel Abuelo, Charly, Miguel Cantilo y un montón más.
AZ: Vos reivindicas sin dudas la idea de rock en un momento donde esa idea incluso parece querer ser apropiada por otros estilos como el trap o la música urbana. ¿Qué es hacer rock hoy en Argentina?
Carca: Yo hago música y no sé bien ni qué es ni cómo definirla. Tampoco sabría decir qué es el rock, pero creo que nadie pretende apropiarse de nada: ¡Las músicas cambian, por suerte! Renegar de las músicas que están de moda me parece muy fuera de moda, sobre todo si sos músico. Lo único que deja ver ese gesto es que sos un viejo looser y resentido al que nadie le da bola. Hay que esforzarse, disfrutar y trabajar para ser mejor cada día. Nada más.
AZ: Venís lanzando varios cortes en el último tiempo que quizá pronto se conviertan en un disco. ¿Tenés algún criterio conceptual pensando en un futuro álbum?
Carca: Quiero dar con una música que no se encuentre en otro lado, que sea mía. No pienso otra cosa. Busco siempre experimentar la vertiginosa sensación de sorprenderme con los resultados. Es difícil, pero con dedicación y tenacidad a veces pasa.
AZ: En “Mi amigo del Bosque” hablás de la relación del ser humano con la naturaleza. ¿Qué dimensión tuya hay ahí?
Carca: Soy un ser de la naturaleza, crecí entre bosques que conocí como la palma de mi mano, de día, de noche y en un sin fin de estados de conciencia. Tengo mi conexión directa con eso aunque hacía mucho tiempo que no enfocaba mis canciones para ese lado. Vivo en capital, donde mil camiones quieren pisarte. Es otro clima. Creo que por eso estuvo tan presente últimamente.
AZ: A lo largo de tu carrera has tocado para públicos que no siempre estaban de tu lado, como por ejemplo el homenaje al rock argentino antes de un show de Korn o la previa de Ozzy Osbourne en River. ¿Cómo te llevás con esos momentos donde hay que ganarse al público?
Carca: Quiero tocar, no me pongo a pensar en la boludez y la frustración que puedan tener los seres humanos. Puedo ganarme al público en muchas circunstancias y en otras, no, ¡y a veces te cagan a botellazos! (risas). Quejarte por eso sería tan triste, es como quejarse por la pandemia. Son gajes del oficio.
AZ: Vas a volver a tocar en vivo luego de un par de años. ¿Cómo preparás este show en particular?
Carca: Siempre en lo que reparo, antes de dar un concierto, es en algo muy íntimo: concentrarse y enfocar. No soy de esos artistas que prometen cosas. Los shows se viven ahí y uno siempre se prepara para darlo todo. No hay más límites que la imaginación, eso es alucinante.//∆z