Sigue nuestra charla con Taura. En esta última entrega la banda habla del trabajo detrás de cada disco, de la influencia de Rush y del agua como tema de muchas de sus canciones

Por Pablo Lakatos

 Taura – 1ra parte

AZ: ¿Cómo es el proceso compositivo? ¿Cuánto se toman en grabar una canción, en grabar un disco, en terminar una canción? Sé que la respuesta va a ser “cuando sentimos que está terminada está terminada”, pero ¿cómo dicen “ahí está el arreglo final”?

Leo: en nuestro caso en general las ideas surgen de la guitarra, o sea que es el principio. Y en base a eso, trabajando en sala, y luego también trabajando en la casa de alguno, por eso tampoco nos gustar sentarnos mucho a tocar una base cinco horas a ver lo que surja. Para nosotros es mucho más productivo individualmente, llevarse el día a su casa y quizás la otra vez traer algo y así se va armando la canción. Después del inicio al producto terminado no hay mucho tiempo, en el medio se descartan un montón de cosas que nunca llegaron a ser. Y otras que sí llegaron a ser, se llegaron a grabar y nunca van a estar en un disco. Pero en sí son canciones que no tienen mucha duración de darle vueltas y vueltas. Se ha hecho con algunas, y de hecho no ha quedado casi ninguna de las que hemos dado vuelta así. Se nos dan naturalmente cortos los procesos.

Alejo: aparte porque nos apoyamos en los demos. Demearnos (de eso se encarga Santi), escuchar fuera del ambiente de la sala y de la banda, solo en casa, escuchar y pensar. Al día siguiente decimos: “bueno, esto correlo acá, esto tocalo así”. Entonces se toca un poco, se le da forma, se vuelve a demear, se vuelve a escuchar. Para nosotros el demo como instrumento…

Leo: es muy importante.

Alejo: sí.

Santi: algo que está bueno de la banda es que ninguno tiene un gran apego a su propia idea. Viste cuando te podés desprender un poco de… Uno cree que se le ocurrió una genialidad, y de repente la compartís (risas). Y te das cuenta que esa genialidad no era tal. A veces es un golpe duro, pero a veces no. A veces te lleva a la reflexión y decís “bueno, no era tan genial lo que se me ocurrió”.

Alejo: y ahí entra lo de volver a escuchar. Grabando el demo, volviéndolo a escuchar después uno dice “al final, la razón la tenía tal o cual persona”. Y en cierta forma te tranquilizás, no te queda otra.

Santi: ¿Viste siempre la unidad que mide cuando ya está la canción y ya está la melodía de voz puesta arriba? Bueno, es como una sensación inmediata, a veces funciona instantáneamente y decís “de acá vamos para adelante”, y a veces retrocedes. A veces ni siquiera llegamos a la instancia de poner una melodía de voz porque directamente la canción no va. Lo interesante es esa interacción en donde nadie se casa con lo que se le ocurre. Eso está bueno porque me parece que logra, sin expresarlo verbalmente, una comunión entre todos que es lo que le da la identidad a la banda. Yo reniego un poco de esa cosa de “compusimos cuarenta y siete canciones para un disco y quedaron doce”, pero escuchas esas doce y decís “para, pero si de las doce la mitad no me gustan, lo que deben ser las otras” Para nosotros es más una cuestión de ir al grano.

Alejo: no es lo nuestro, siempre se descarta una, dos canciones, lamentablemente siempre la misma, pero buen.

AZ: bueno, hablaron los chicos entonces te pregunto a vos (Chaimon): ¿Cómo es tu proceso personal con las letras? ¿Con las melodías?

Ch: en general yo escribo, entonces lo que hago es ver, aquello que escribo, qué coherencia tiene con aquello que escucho, para que la canción tenga una lógica. Que no escuches una melodía triste y la letra hable de fiestas, como las de Kiss. En general el proceso no varía nada con respecto al proceso musical…

AZ: escuchar, pensar…

Ch: escuchar, ver las letras que tengo, las que… a veces armo algo a partir de la canción que me inspira algo, lo aplico… Y por suerte tampoco me caso con mi idea de letra, con mi idea de melodía, con nada. Propongo algo en base a lo compuesto, y una vez que está ese total, todos decidimos que nos gusta y que no nos gusta. A mi particularmente lo que mas me da cosa es que a veces, esto no llega a la gente pero, hay canciones que yo siento que están buenísimas y…. yo a veces…. no tengo algo a la altura y…

AZ: bueno, pero si estás en la banda ellos piensan que sí ¡tranquilo! (risas)

Ch: por ahí hay canciones que en general, no sé, están increíbles, y que yo siento que no pude estar a la altura. En esa parte del proceso yo siento una responsabilidad que no es ni mejor ni peor, pero en algún punto la canción es infartante en el total, pero lo primero que impacta en el oído es lo que se canta. Es el oído pop que todos tenemos en algún sentido, no siendo una banda pop. Y contra eso no puedo ir, ni quiero. Entonces es un trabajo bastante intenso el que hacemos todos, y en lo que a mi respecta tengo la responsabilidad y en un punto la presión de estar a la altura de ellos. Es una responsabilidad para mí que esa canción pueda tomar vida. Porque es así, lo que vale es la canción. Ni mi melodía, ni mi letra, ni el riff. Está todo buenísimo, pero si lo que hago yo no está bueno…

AZ: está bueno que ustedes como conjunto entienden la canción como una cuestión… Hay una canción de Pez que dice: “No tengo nada que ver con tu idea de rock”. Y está bueno eso, no vengo y toco y RRRARRRROOOOCCCKKK. Voy a mi casa, pienso, me tomo el tiempo, ubico las cosas. Tocan pesado, tocan metal, pero hay lugar para la melodía, hay una cierta madurez en ese sentido (risas) ¡Chicos felicitaciones!

(Más risas) Ch: a mí también me gusta Pez y me identifica un poco esa frase, porque nosotros sentimos que no tenemos nada que ver con nadie. Tenemos otra forma de trabajar, otra forma de grabar los discos, etc. No tenemos nada que ver, ni para bien ni para mal, no tenemos nada que ver. Nos gusta que la gente que nos venga a ver vea un show que suene bien, que esté bien, que empiecen a horario, que las bandas que nosotros invitamos tengan todo para hacer el mejor show posible. Tocan con el mismo sonido que nosotros. Todo lo hacemos en pos de diferenciarnos en todo sentido. Después, están las canciones. Si no tenemos nada que ver con nadie, y escuchas la canción, y no te gusta, no sirve de nada no tener nada que ver con nadie. Pero lo que dice Minimal, yo lo comparto.

Alejo: la diferenciación no es algo adrede. No es que hacemos algo para ir en contra de. Es que nosotros tenemos una idea en la cabeza, y para hacerla sentimos que tenemos que hacer x cantidad de pasos. Da la casualidad que todos hacen otras cosas. No es que decimos “bueno, como todos hacen esto, nosotros a propósito hagamos de contra” No, es que realmente creemos que para hacer tal cosa, y para hacerla bien hay que hacer todo.

Ch: nuestra guía es Rush, tipos que hacen la música que quieren, que no se preocupan por salir lindos en la foto. Tampoco lo son, no? (risas). Que no están detrás de la tapa de la Rolling Stone, que tampoco tienen el mejor video habido y por haber. Ellos hacen lo que les gusta hacer. Y si vos querés ubicar a Rush en algún… Sí, le gusta al rockero, le gusta al metalero… No importa, lo más importante es la música y la canción, y en eso no nos movemos. Ojala pasemos de llevar x cantidad de personas, a llevar el doble. Nosotros creemos en nuestro poder que es el poder de la canción, todo lo demás es para que esa canción sea escuchada con libertad, en un punto.

Santi: y citando a Ricardo (NdR: ¿Iorio?) en realidad ni siquiera podemos considerar que nuestra música esté inmersa en lo que se denomina rock  nacional, aunque a pesar de todo somos una banda de rock nacional. A ver, nos gustan bandas del país, pero no hay una referencia directa con una banda de rock nacional. Como dijimos un día que fuimos a una nota con Leo, acá se le ha dicho rock a cosas que no lo eran. No porque alguien le diga rock a algo que para nosotros no lo es vamos a decir “bueno, entonces nosotros hacemos chamamé progresivo”. No es una cuestión de ubicarse, no es una cuestión de definirte por lo que no sos. Esto es para mí lo que finalmente te termina condenando. “¿Qué sos?” “Y, no soy esto, no soy lo otro”, pero no me estás diciendo que es lo que sos. Nosotros tocamos rock, es una banda de rock. Pero no tenemos la idea de Rock que probablemente se tenga acá.

AZ: yo cuando lo conocí a Santiago cometí el error de preguntarle si eran de Mar del Plata ustedes, porque yo no se porque había flasheado mal, pero posta, hace un montón de años, como desde el 2007 que pensaba que eran de Mar Del Plata ustedes.

Santi: y yo te conté que tal vez la confusión había surgido porque teníamos una canción que se llama Miramar, que está al lado y que casualmente, más allá de que fue una ciudad en la que yo veraneé de chiquito, después cuando nos conocimos con Chai, él también veraneaba ahí entonces fue como… “bueno, hagamos una canción” (risas).

AZ: incluso, me pasó cuando llegué a casa y vi los discos que me diste. Yo me equivoqué, pero es innegable hay como una relación con el agua que tienen ustedes muy fuerte. Tienen: “Miramar”, “Pleamar”, “Bajamar”… (risas)

Alejo: “El Muelle”

Leo: “A Cántaros”

AZ: “Laguna Negra”. Y además, todas las fotos del librito de El Fin Del Color son burbujas de agua. Entonces ¿qué les pasa con el agua?

Ch: el agua es transmisora de energía (risas).

Leo: estamos hechos en un 70% de agua.

Ch: el agua se lleva lo bueno y lo malo. Sentimos que el agua dice muchas cosas de nosotros.

AZ: ¿También está inconsciente, vuelve?

Ch: ea verdad que nunca hicimos ese racconto, como ahora (risas).

Santi: no fue intelectualizado (risas).

Ch: sucede, a nosotros el mar nos identifica de un modo determinado, que sé yo. El sonido del mar, veraneamos en ciudades que tengan mar, salvo Alejo que le gusta estar en la nieve. La pasamos bien en ese lugar. Somos personas en un punto medio sedentarias, delante del mar te podés sentar veinte mil horas. No sé si hay algo que podamos decirte al respecto, sí que es un universo que nos permite apoyarnos en él para hablar, decir, mostrar.

Santi: y es inspirador. Va a sonar cursi, pero viste que cuando te enfrentas a la inmensidad decís “uhhhhhh, somos tan pequeños” y esos lugares comunes.

AZ: pero es posta. Es re posta.

Santi: si vos hacés la experiencia, porque también nos hemos ido de vacaciones juntos alguna que otra vez y viste esa cosa de bueno, estás al lado de otra persona pero en realidad, como dice la canción de Chris Cornell, hay “diez mil kilómetros de distancia”. Esa cosa de tener la soledad estando acompañado. Hemos hecho esa experiencia de ponernos los auriculares, eso de estar de frente al agua, a una montaña, de frente a lo que vos quieras, porque también nos pasó cuando viajamos a Europa, te enfrentas a paisajes que no vas a ver nunca acá, o diferentes, y un poco te afecta eso, te inspira. Ni siquiera tiene que ser para algo musical, te inspira. Y estar con el Walkman, o el discman o el mp3 clavado te lleva a un lugar que por suerte, nosotros creo que después lo aprovechamos para generar nuevas ideas para la banda

AZ: ¿El disco lo grabaron el año pasado?

Santi: lo grabamos en el 2011, febrero-marzo. Empezamos con las bases, batería, bajo…

AZ: llegaron con el disco todo compuesto.

Santi: sí, sí. Mas o menos (risas). Casi que sí. Después las guitarras y después esto que hablábamos del trabajo de voces, un poco que nos internamos…

AZ: para definir el sonido.

Santi: más que nada porque teníamos ideas previas de cómo queríamos que sonara. Entonces hubo un trabajo a conciencia largo, a veces tedioso porque es largo, pero buen, es lo que hay que hacer. Ponele que terminamos más o menos a mitad de año, en junio-julio. Después tuvimos el problema que hablábamos antes. Pero si lo pensás, incluyendo el laburo de fotos, el arte. Todo el proceso, en seis, siete meses, para nosotros, es como un mérito doble. ¿Viste cuando das algo que vos hacés, y no le tenés que explicar nada a nadie? Lo podés entregar sin la necesidad de tener que explicar nada. Eso para mí… Como que la sensación la tuve siempre, pero como que se va a acrecentando, cada vez hablás menos al respecto de lo que estás presentando. Eso para mi está buenísimo

AZ: ¿Lo sentís parecido al éxito? ¿Por lo menos para vos?

Santi: para mí el éxito tiene otra connotación, pero, ponele que sí. Es la satisfacción de dar algo que vos hiciste, que lleva tu nombre y estar orgulloso de eso. Y nunca conforme que ese es tu límite, ese es tu techo. Es así: el mejor disco que podamos llegar a grabar es el que nunca vamos a hacer porque nos vamos a morir antes o la banda se va a separar. Pero es eso, es perseguir esa idea. Es ir atrás de lo que para vos es tu máxima expresión. Y para mí la banda va en ese camino. Después, lo que dijo acá el maestro. Poné play, te gusta o no te gusta. Pero esa ya está fuera, no tenés acceso, no lo podés dominar. Domination, Morbid Angel.

AZ: bueno ahora sí, para terminar. ¿Ahora qué hacen? (Risas) ¿Qué van…

CH: el plan es en marzo tener una fecha para comenzar el año. En mayo, si todo sale bien debería salir una edición en vinilo, que edita un sello local. El plan de este año es llevar a la banda a un estadío un poco más alto porque es lo que la gente que nos viene a ver nos está exigiendo.//z

[youtube]http://youtu.be/CB1lHP-HaZM[/youtube]