Limp Bizkit volvió a sus raíces con su sexto disco, Gold Cobra, que acaba de ser editado. Además, tocan el 1 de agosto en el Estadio Malvinas Argentinas. Escuchálo antes así vas con todas las canciones aprendidas, ¿capishe?
Por Joel Vargas
Volvió el brabucón de Fred Durst, volvieron las letras irónicas, volvieron las violas precisas de Wes Borland, pero más que nada volvió Limp Bizkit. Pasaron 6 años de silencio discográfico de la banda oriunda de Jacksonville, Florida, y en el medio hubo de todo: amagues de reunión, giras canceladas, nuevos tatuajes de Durst y hasta apareció Lady Gaga en el mundo de la música. ¿Alguien se acuerda del furor que fue Significant Other (1999) diez años atrás? ¿De “Nookie”? ¿De la gorrita roja de beisbol de Durst? ¿Y de “Take a look around”? Algunos podrían decirme: Sí, ¡yo vi a Fred Durst en Mtv! Bueno, recordemos un poco cómo era el mercado en esa época: estaba lleno de boy bands como ‘N Sync y Backstreet Boys, por citar los ejemplos más famosos, y era el principio del reinado de Britney Spears. Por aquel entonces el Nü Metal era la música elegida por los adolescentes que querían ser “rebeldes”. Un poco de tachas, una remerita negra y un par de gritos ya los hacía “rockeros”; la banda sonora ideal era Limp Bizkit.
Pero seamos buenos, Significant Other era un discazo. Después llegó Chocolate Starfish and the Hotdog Flavored Water (2000) y el éxito subió aún más. Pero Wes Borland, gran artífice del sonido característico de Limp Bizkit, dejó la banda y el Nü Metal empezó a saturarse a sí mismo para no evolucionar. La conjunción de esto se vió en el disco Results May Vary (2003), con muy pocas canciones rescatables, como “Eat you alive” y la olvidable versión del clásico de los Who, “Behind Blue Eyes”. En esa ocasión, Mike Smith trató de llenar los zapatos gigantes de Borland, pero no alcanzó. Fue un fracaso. Era el principio del fin. En 2005, Borland regresó a la banda para grabar un EP que dejó gusto a poco, The Unquestionable Truth (Part 1), aunque mejor que el disco anterior. Era casi la vuelta de la formación original. Digo casi, porque John Otto se había internado para rehabilitarse, y el encargado de los parches fue Sammy Siegler. Pero un día volvieron todos y ¡vienen a la Argentina! Después de haber cancelado su visita el año pasado por una lesión en la espalda de Durst, esta vez el show está programado para que sea el 1 de agosto en el Estadio Malvinas Argentinas y no en el Luna Park. Las entradas están ya a la venta por Ticketek.
“Decidimos que estábamos aburridos y disgustados con el estado de la pesada música popular más de lo que estábamos con nosotros mismos. Independientemente de que nuestros caminos se han separado, reconocemos que hay una energía poderosa y única con este grupo particular de personas que no hemos encontrado en ningún otro lugar. Esta es la razón por la cual Limp Bizkit está de vuelta”. Esas fueron las palabras que dieron en conjunto los recientemente reunidos Fred Durst, Wes Borland, Dj Lethal, John Otto y Sam Rivers. Desde el vamos Gold Cobra, sexto disco de la banda, tiene ese espíritu: traer de vuelta lo que fueron alguna vez. Arranca con la característica intro que tiene cada disco de la banda, para luego empezar con “Bring it back”, donde Durst canta/rapea que “hay que traer eso de vuelta”, sobre un mar de distorsión de la guitarra de Borland, para luego desatar la furia en el estribo. Un comienzo potente. Sigue con el tema que le da nombre al disco, “Gold Cobra”, segundo corte del disco. La fórmula es Durst bardeando a todos sobre una base cortesía de Otto y Rivers (excelente tándem) con un estribillo extremadamente pegadizo donde otra vez las violas de Borland hipnotizan. El cuarto track, “Shark Attack”, tiene reminiscencias a “Break Stuff”: unas guitarras potentes, sobre unas batas demoledoras. Sin dudas es el ataque de un tiburón que quiere carne fresca. ¿Y el hip hop? Bueno, vuelve en “Get a Life”, con unas rimas donde Durst pone a todos en su lugar hasta llegar al estribillo donde se desata la furia con Fred gritando: “Get a life! Get a motherfucking life!”. Definitivamente, uno de los mejores temas del álbum, ya que pasa por todos los climas posibles en una canción bizkit: hip-hop, metal duro, arreglos de Borland, un puente donde Durst muestra que puede cantar además de rapear y gritar, y un final made in Dj Lethal.
Llegamos a la mitad de Gold Cobra y nos encontramos con “Shotgun”, primer single del disco y el hit. La canción está escrita en clave gansta rap (cumbia villera si se busca un paralelo argento). “Everybody jumps from the sound of the shotgun. In my neighborhood, everybody got one”, que sería básicamente: “Todos saltan con los tiros de un fierro, en mi barrio todos están calzados, guacho”. Además, el tema tiene un excelente solo de Borland para concluir con un final épico a puros “cuetazos” de itaca. “Douche Bag” viene por el mismo camino que todo lo anterior: quilombo y estribillos pegadizos. Aunque termina imprevistamente con una especie de jazz y con Durst cagándose de risa. Entonces llega la “balada” grungera “Walkin Away”, que termina a puros gritos podridos (cualquier parecido con la estructura de “Re- Arranged” es pura casualidad, ¿no Borland?). Sigue con “Loser”, el peor tema del disco, que lo tenés que escuchar muchas veces para que te guste un poco. Tiene mucho hip-hop, pero tiene un estribillo pegadizo. Basta Durst de decir que sos un perdedor…
“Autotunage” empieza con Durst aregando: “John Otto! Break it on down! That’s right! Ladies and gentleman! Once again… Limp Bizkit!”. Y en el estribo canta: “Oh yeah, Let me see them hands/Let me see you smile/Let me see you rock”, que en versión argenta sería: “las manos de todos arriba, armate un poguito, ¡salten putos!”. El disco termina con tres tracks donde Borland se destaca aun más: “90210”, que además de ser el código postal de Beverly Hills y una serie noventosa también es un buen tema de Bizkit; “Why Try” es una declaración de principios de la banda, ese “porqué no intentarlo de vuelta”, y “Killer in you” que es un hip-hop duro que saca el asesino que está dentro tuyo. Sí, lo hicieron de vuelta, otra vez tienen su mojo, once again… ¡Limp Bizkit!
AZ recomienda: “Get a Life”, “Shotgun” “Gold Cobra” y “Bring it back”.